La tarea de ser padres es una carrera de fondo, generalmente compartida en familia. Aunque es evidente y por todos conocido, algunos estudios de publicación reciente nos han descubierto nuevos aspectos de la figura del padre en la infancia, clave para el desarrollo de la personalidad de los hijos.
Una sensibilidad diferente
La crianza es una de las tareas más difíciles de ser padres y un compromiso de por vida con los hijos, un vínculo que va más allá de las necesidades básicas. En el caso de la figura paterna, un estudio publicado en mayo de 2017 en la revista Behavioral Neuroscience, de la American Psychological Association , sobre las influencias del comportamiento paterno según el género infantil concluyó que los padres responden de forma diferente según si son papás de niñas o de niños.
Entre sus principales conclusiones destaca que los padres de niñas son más atentos con ellas, les cantan más canciones y no tienen reparo en mostrarse más abiertos en lo relativo a las emociones (incluida la tristeza) o lenguaje analítico, y en el caso de padres de niños la tendencia es a participar en juegos más ásperos y a utilizar un lenguaje más relacionado con el logro con palabras como “orgullo”, “triunfo” o “superior”.
Nociones inconscientes de género
Según la investigadora principal de este estudio, Jennifer Mascaro, profesora de la Universidad de Emory, esta circunstancia ocurre, posiblemente, porque los padres aceptan más los sentimientos de las niñas que los de los niños de forma inconsciente.
Los padres fueron sometidos a pruebas en las que se buscó determinar si la forma de tratar a hijos o hijas puede estar influenciada por diferentes respuestas cerebrales, además de otras mediciones en su entorno real con dispositivos que les grabaron de forma aleatoria durante 48 horas interactuando con sus hijos e hijas.